Alegría

Alegría (Seudo soneto)

Vida: rio que se lleva el agua,
rio extraño, que se está riendo,
rio tan loco que se va cayendo
en la historia seca de la fragua.

Mínima es mi piedra gris y dura
que alborota al monte y choca.
De un joven risa fresca y pura
como el agua en cascada loca.

Alto surtidor, oscura piedra,
que es alivio del calor, umbría,
murmullo suave entre la yedra,

descanso de mi caminar del día,
remanso en que el alma medra.
Risa, descanso y sombra: Alegría.

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2 respuestas a “ Alegría ”

  1. Pobrecito hablador dice:

    !Hola!

    A mi esto me parece un auténtico soneto -tengo yo predilección por los sonetos, !cuánto me gustan los sonetos!, !ojalá vuelvan a resucitar algún día los sonetos!-. Por eso, yo lo dejaría como está. En todo caso, yo le podaría una palabra: lo de «pseudo» me suena un poco falso. Falsa modestia, claro, pero olvidémosnos de las modestías a la hora de firmar sonetos.

    Y no es que no te entienda: yo escribiría todo con pseudónimo, iría por la calle con careta, me cambiaría todos los días de casa para que nadie me encontrase durante los registros, y para que no me reconociesen cambiaría de voz, ensayaría maldiciones en un idioma desconocido, falsificaría mi propio firma en todos mis poemas sin fondo, me haría el invisible para no dejar nunca señales de mi rastro, trataría de esquivar a mi sombra para que el sol no me descubriese, dejaría en mi tumba un epitafio falso, un cadaver de otro, unos deudos confundidos, una necrológica ficticia: eso sí, si por un casual se me concediera el milagro de la resurección, entonces renacería con todo mi cuerpo glorioso, y no me reconocería ni Dios Mientras tanto, todo lo que hacemos es pseudo. Todo lo que hacemos anda comido por la duda.

    Este soneto, en cambio, me parece que no se merece ser pseudo: es todo un soneto.

    Con mis incordiosos saludos, que son también tan pseudos, que siempre me gustaría irme haciendo mutis por los foros.

  2. Tupacalos dice:

    Como siempre, agradezco el ánimo que me das. Lo de seudo va porque no estoy muy seguro de la métrica… no sea que un filólogo me saque los colores.
    Gracias pobrecito y te sigo leyendo en esa antoligía poética informal con el brillo de lo que se hace sin darle importancia. ¡Y mis inquietudes incrustadas en semejante colección de genios! De verdad no lo merezco.

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