POETAS 97. Jorge Guillén I (Cántico)

CIMA DE LA DELICIA

!Cima de la delicia!
Todo en el aire es pájaro.
Se cierne lo inmediato
resuelo en lejanía.

!Hueste de esbeltas fuerzas!
!Qué alacridad de mozo
en el espacio airoso,
henchido de presencia!

El mundo tiene cándida
profundidad de espejo.
Las más claras distancias
Sueñan lo verdadero.

!Dulzura de los años
irreparables! !Bodas
Tardías con la historia
Que desamé a diario!

Más, todavía más.
hacia el sol, en volandas
la plenitud se escapa.
!Ya sólo sé cantar!

*****

EL RUISEÑOR

El ruiseñor, pavo real
facilísimo del pío,
envía su memorial
sobre la curva del río
lejos, muy lejos, a un día
parado en su mediodía,
donde un ave carmesí,
cenit de un primavera
redonda, perfecta esfera,
no responde nunca: sí.

*****

PAN

En el pan de tanta miga
-apretadamente suave-
a más sol de julio sabe,
dorada quietud de espiga,
la corteza. Siga, siga
variando el atractivo
del festín. Está cautivo
mi gusto. Bien lo acompaña
-Esencia que fuese entraña-
el pan, el pan sustantivo.

*****

BEATO SILLÓN

!Beato sillón! La casa
corrobora su presencia
con la vaga intermitencia
de su invocación en masa
a la memoria. No pasa
nada. Los ojos no ven,
saben. El mundo está bien
hecho. El instante lo exalta
a marea, de tan alta,
de tan alta, sin vaivén.

*****

MELENAS

!Oh melenas, onduladas
a lo príncipe en la augusta
vida triunfante: nos gusta
ver amanecer -doradas
surgen- estas alboradas
de virginidad que apenas
tú, Profusión, desordenadas
para que todo a la vez
priviligie la esbeltez
más juvenil, oh melenas!

*****

PERDIDO ENTRE TANTA GENTE

Perdido entre tanta gente
que el semblante sin nombre,
soy nada menos el Hombre:
mi abstracción indiferente.
¿Qué hacer? ¿Gritar? Dulcemente
la ondulación de fatiga
que en sus silencios abriga
lo anónimo sin capricho,
lo no hablado, de tan dicho,
se opone: -Soy buena amiga.

*****

PERFECCIÓN

Queda curvo el firmamento,
compacto azul, sobre el día,
es el redondeamiento
del esplendor: mediodía.
Todo es cúpula. Reposa,
central sin querer, la rosa,
a un sol en cenit sujeta.
Y tanto se da el presente
que el pie caminante siente
la integridad del planeta.

*****

VASO DE AGUA

No es mi sed, no son mis labios
Quienes se placen en esa
frescura ni con resabios
de museo se embelesa
mi visión de tal aplomo:
líquido volumen como
cristal que fuese aún más terso.
Vista y fe son a la vez
quienes te ven, sencillez
última del universo.

*****

LA ROSA

                 A Juan Ramón Jiménez

Yo vi la rosa: clausura
primera de la armonía,
tranquilamente futura.
Su perfección sin profía
serenaba al ruiseñor,
cruel en el esplendor
espiral del gorgorito.
Y el aire ciñó el espacio
con plenitud de palacio,
y fue ya imposible el grito.

*****

FE

El alba. Todo me espera
también hoy.
Una fe con su certeza
voz del aliento
me impulsa y mantiene fuera
de este mundo que yo soy,
de un viento
que me enlaza a un real octubre.
No, no invento.
¿No soy yo quien él descubre?

*****

LA VOCACIÓN

Cada minuto viene tan repleto
que su fuerza no pasa,
y aunque el reloj sujeto,
no se humilla a su tasa
justa, no se disuelve en un discreto
suspiro. Por debajo
de un más sensible sin cesar Presente,
cada minuto siente
que seduce una voz a su trabajo.
-Dame tu amor, tu lento amor, detente.

*****

LOS BRAZOS

!Cómo sueñan los brazos! Son ellos los capaces
De ajustar a su orbe fabuloso y pequeño
-Amor: henos aquí para que nos enlaces-
esa verdad tan plena que se convierte en sueño.

*****

EL RETRASADO

De prisa, de prisa, de prisa
!Paso!
A los pies el alma se lanza,
y el sol por el suelo se alisa.
!Qué bello,
por fin mi atropello!
El suelo a este paso se rinde más raso.
La vida es cruel y precisa
!Cómo ahora se abraza a mi tardanza!
De prisa, de prisa, de prisa.

*****

LA PALABRA NECESARIA

He visto en los jardines tales Junios sin hombres
que mi voz necesita decir, entre los nombres
celestes de la flora,
alguno que al sonar me restituya
la Aurora
violenta,
cuando irrumpe con ramos y hace suya
la luz que más inventa.
Pido un nombre de flor que en la memoria anime:
Total y sin nadie el jardín de Junio sublime.

*****

DORMIDO SOÑADOR

Cedí,
         me abandoné,
                                 confié a la tiniebla
toda el alma y su peso
                                      para profundizar
Hasta el fondo arenoso que el desvario puebla.

!Ay!

        Emergí. !Qué dicha sobre el nivel del mar!

*****

AMOR DORMIDO

Dormías, los brazos me tendiste y por sorpresa
rodeaste mi insomnio. ¿Apartabas así
la noche desvelada, bajo la luna presa?
Tu soñar me envolvía, soñado me sentí.

*****
 

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Una respuesta a “ POETAS 97. Jorge Guillén I (Cántico) ”

  1. micaela dice:

    Ser, nada más. Y basta.
    Es la absoluta dicha.

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