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susurro, estruendo

no susurro, no estruendo

agua entre piedras

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Se inaugura una nueva estación, en la que el viento irá dejando caer por aquí algún que otro ‘haiku’, esporádico como las hojas.

Éste primero va dedicado a Eva, a Pobrecito hablador y a A.C., que caminaron hace unos días junto a los árboles a los que se alude (aunque no sé si repararían en los pájaros que se paseaban, no por las ramas, sino por la verticalidad de los troncos…). El último verso, por supuesto, va para Tupacalos ;)

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sol en las hojas

pájaros sobre el tronco

recóndita raíz

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viento remoto
centellean las hojas
soy aire y luz

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lejos del hogar
trémulos faroles
marcan un rumbo

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hay nubes, noche
en vano has esperado
la luna de Agosto

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la noche crepita
efímera y eterna
buye la vida

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velado su color
es mayor la fragancia
de las flores

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telón de cielo
recortan su negrura
siluetas mudas

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gira la noche
revolución perpetua
un punto inmóvil

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garzas en lo alto
sobre la tierra seca
afán de hormigas

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